domingo, 19 de junio de 2011

Juramento Hipocrático y Principios de Beauchamp

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Héctor

25 comentarios:

  1. EL JURAMENTO HIPOCRÁTICO EN NUESTROS DÍAS: Este juramento, está notablemente impregnado de un ritualismo que sobrevivió en Grecia a pesar de los aportes de Hipócrates a la medicina. Antes de él, la medicina era esencialmente de un carácter mágico-religioso, que atribuía los males y enfermedades a consecuencias de un castigo divino o al terreno meramente espiritual.
    Hipócrates aporta un nuevo giro a la medicina que desde ese momento en adelante se tornó basada en la observación (práctica clínica que impera hasta la actualidad). Pero así mismo expresa un paternalismo: El médico es visto como el sanador y que a la vez es maestro de otros que se dedican a la misma profesión.
    La ética y la moral son las base sobre la que se legitima cualquier uso que se le da a la medicina, que en este juramento se muestra como un servicio noble y virtuoso.

    LOS PRINCIPIOS DE BEAUCHAMP SON: Autonomía, beneficencia, no maleficencia y de justicia.

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  2. De acuerdo con el 2º y 3º de los juramentos: ”Tributaré a mi maestro … trataré a sus hijos como …si quieren aprender la ciencia, se la enseñaré …” y el otro “Instruiré con preceptos, lecciones orales y demás modos de enseñanza … a los discípulos que se me unan bajo el convenio y juramento que determine la ley médica, y a nadie más”
    /- Ubico, dentro de la orientación de la bioética principialista al ‘principio de justicia’, que nos dice que todos los recursos y beneficios que se obtengan por el avance médico, deben ser aplicables a todos, aparte de que se establece una especie de hermandad de la profesión, es una promesa de compromiso solemne tanto la protección del ser humano como el avance del conocimiento.
    Además, el juramento 4º: “Estableceré el régimen de los enfermos de la manera que les sea más provechosa según mis facultades y a mi entender, evitando todo mal y toda injusticia…” /-El principio de beneficencia.
    De la misma manera, cuando establece “En cualquier casa donde entre, no llevaré otro objetivo que el bien de los enfermos…”
    /-Es deducible el principio de no maleficencia, y que además se basa en criterios morales, como a continuación sigue: “…me libraré de cometer voluntariamente faltas injuriosas o acciones corruptoras y evitaré sobre todo la seducción de mujeres u hombres, libres o esclavos”.
    Así como también: “Guardaré secreto sobre lo que oiga y vea en la sociedad por razón de mi ejercicio y que no sea indispensable divulgar…”
    /-Aunque no es explícito el principio de respeto a la persona, se puede hacer extensivo que con la reserva de la información, la información se restringe en tanto no sea ‘indispensable’ su divulgación; teniendo a que la discreción opera a favor de la dignidad de la persona.
    Manuel De La Torre lavarello
    Cod: 08020232

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  3. *Por si acaso al momento de redactar las partes que se restringen al comentario requerido para la practica sumaban 13 lineas, pero al pasarlo al bolg salió como si fuese un solo parrafo.
    Manuel De La Torre

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  4. Fernando W. Zegarra Toro22 de junio de 2011, 10:10

    COMENTARIOS AL JURAMENTO HIPOCRÁTICO
    Alguien dijo que la Historia nos permite proyectar nuestro futuro reflexionando sobre nuestro presente y este tema ratifica lo escrito. El juramento hipocrático que data entre el siglo VI a V a.C. al I d.C. La principal revisión moderna fue la llevada a cabo en 1984, en Ginebra, por la Asamblea General de la World Medical Association.
    Hoy que vivimos en una sociedad supercomunicada y nos encontramos interconectados en la red global, con Tratados de Libre Comercio podemos apreciar que si algo se viene perdiendo a pasos agigantados son los valores y principios incluso en aquellos que deben de ser insignes representantes del valor supremo de toda sociedad: La vida y con ella la dignidad (núcleo esencial de nuestra carta magna en su artículo primero).
    Solo basta con acercarnos a un hospital o entidad de servicio de salud para apreciar como “el servicio a la humanidad” es convertido por el poder económico en un servicio selectivo: El mismo médico que atiende en el Hospital Estatal y que es el mismo médico en una Clínica de reconocido prestigio son dos personas distintas en brindar un servicio humanitario con cordialidad y amabilidad. Aquel compromiso de “ejercer mi profesión dignamente y a conciencia”, se ha transformado en un servicio entre los laboratorios y el paciente recibiendo incentivos para incrementar las pingües ganancias de los “reconocidos” laboratorios.
    Ni la revisión moderna de la Declaración de Ginebra a permitido revalorar dicho juramento solo lo ha hecho más formalista y por ende alejado de la realidad social ya que bastaría una encuesta (a muchos les encanta la foto del momento) realizada en EEUU y Perú para encontrar coincidencias respecto a lo que se entiende por “consagrar mi vida al servicio de la humanidad” o “la salud de mis pacientes será mi primer objetivo”.

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  5. Fernando W. Zegarra Toro22 de junio de 2011, 10:12

    COMENTARIOS A LOS PRINCIPIOS DE BEAUCHAMP
    Toda declaración necesariamente debe partir por establecer principios y valores que son los que determinan la rectitud de nuestras acciones. Los principios en comentario buscan establecer lo mínimo necesario que tiene que tenerse en consideración para revalorar el concepto y sentido de persona humana.
    Estos principios no sólo deben de aplicarse a pacientes enfermos (entendiendo enfermo no solo a la dolencia física sino a la psíquica y moral como punto de partida y no al revés), sino a la persona que se acerca a un médico para que lo oriente, asesore y ayude en su dolencia. Si deseas curar el cuerpo empieza por curar el alma me lo dijo alguna vez una Dra. Albanesa.
    Algunos estudiosos en estos principios sostienes (a lo cual me adhiero) que existe dos niveles de principios. El Primer nivel o nivel universal son los que se refieren a la relación entre el personal sanitario y el paciente y son independientes de la voluntad de este. Obligan a todos los ciudadanos. Constituye lo que se llama “ética de mínimos” y deben ser garantizados por el Estado. El Estado que no los cumpla estará en por debajo de los mínimos morales. Estos son:
    Principio de no-maleficencia, se basa en el principio hipocrático “ante todo, no hacer daño” no debiendo, el galeno, utilizar sus conocimientos para hacer daño.
    Principio de Justicia, Se fundamenta en que todas las personas tienen la misma dignidad, y por tanto, son merecedoras de igual consideración y respeto. Pero además implica luchar por una distribución justa y equitativa de los limitados recursos sanitarios para conseguir el máximo beneficio en la comunidad, evitando desigualdades en la asistencia sanitaria.
    El segundo nivel o nivel particular, son los que se refieren a la relación existente entre el personal sanitario y el paciente. Constituyen la llamada “ética de máximos” porque a la persona y no a los demás.
    Principio de autonomía, este principio siempre estuvo ausente en la tradición médica. Durante muchos siglos el paciente nunca había participado en la toma de decisiones y el médico era quien decidía. Este principio obliga a informar al enfermo, si así lo desea, sobre el diagnóstico y posibilidades terapéuticas, con sus riesgos y beneficios.
    Principio de Beneficencia, Pretende que la actuación del sistema sanitario sea beneficiosa para el paciente. Manda hacer el bien y se basa en que los procedimientos, diagnóstico y terapéuticos que se apliquen deben beneficiar al paciente, es decir, ser seguros y efectivos

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  6. No se preocupe Sr. De La Torre, tendremos en cuenta lo señalado. A todos: como verán la práctica es muy sencilla, seguimos atentos a sus comentarios, no esperen la última hora.

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  7. Clara Mosquera Vásquez22 de junio de 2011, 11:44

    Hoy ha sido publicada en El Peruano la Ley 29715 que modifica la Ley que regula el proceso de filiación - Ley 28457, es necesario que lean ambas leyes para discutir en clase los alcances de las mismas.

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  8. María Ysabel Silva Arias23 de junio de 2011, 1:17

    La identificación de los principios bioéticos en el juramento hipocrático.-
    La ubicación de los mismos requiere de un cierto análisis, el primero que mencionaremos sera el principio de autonomia o como tambien lo conocen de autodeterminación, el cual podriamos vincular con el “consentimiento informado”, sin dejar de lado claro esta las otras vinculaciones que se le puedan hacer validamente. Ahora bien según mi parecer no encuentro ubicado este principio en dicho juramento pues como bien se afirma durante mucho tiempo este al igual que muchos otros codigos deontologicos trataron a los pacientes como a niños que no podian decidir sobre si mismos de ahí el llamado “carácter paternalista”, asi lo demostraria lo que vemos seguidamente: “Aplicare mis tratamientos para beneficio de los enfermos según mi capacidad y buen juicio”
    De otro lado el principio de beneficencia al igual que el de no maleficencia podemos ubicarlos en varias de las lineas que forman parte del contenido de dicho juramento. Asi por ejemplo tenemos con respecto al primero frases como la que mencionaramos anteriormente (“…para beneficio de los enfermos”) y en “siempre que entráre en una casa, lo haré para el bien del enfermo”. Con respecto al segundo principio frases como “me abstendré de hacerles daño”o “a nadie aunque me lo pidiera, dare un veneno ni a nadie le sugerire que lo tome”, “nunca proporcionare a mujer alguna pesario abortivo” nos confirman la presencia del mismo, en el escrito que nos convoca. Por último el principio de justicia -equiparado muchas veces con el de igualdad- logramos ubicarlo literalmente en frases que proscriben en todo caso su negación por decirlo de algún modo, tales como “me abstendre de hacerles daño o injusticia”o en “me abstendré de toda mala acción o injusticia”. En conclusión podemos señalar la ubicación de tres de los cuatro principios bioéticos en estudio, con la execpción como dijeramos lineas antes del principio de autonomía. Asimismo es igual de interesante resaltar de lo q ue podría ser el antecesor de lo que hoy conocemos como “secreto médico”.

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  9. Katherine Rázuri Espinoza23 de junio de 2011, 9:42

    Juramento Hipocrático, el cual establece los parámetros dentro de los cuales se debe ejercer esta profesión.
    Como bien sabemos la Medicina Humana es una ciencia que tiene por objeto el estudio de la vida en los seres humanos, siendo sus especialistas los sujetos que conocemos como médicos, doctores o galenos.
    El punto de partida de esta ciencia es la conservación de la vida y la preservación de la salud.
    Tengamos en cuenta que la vida es considerada como un bien jurídico y derecho fundamental en todos los ordenamientos jurídicos del mundo, es decir, es la base sobre la cual se construyen los demás derechos. Por ello considero que se debe de contar con profesionales que hayan recibido una capacitación óptima que les haya permitido adquirir aptitudes y habilidades con la finalidad de ejercer correctamente dicha profesión. Como consecuencia de la relevancia del objeto de estudio de esta ciencia es que se cuenta con un cuerpo normativo ético: el juramento hipocrático.
    Desde mi punto de vista éste juramento está estrechamente vinculado con una serie de derechos fundamentales como:
    • La dignidad de la persona humana; en cuanto ésta debe de ser tratada como tal y no como un mero objeto o instrumento, esto es, no debe utilizarse a las personas para realizar investigaciones vulnerando sus derechos como ser humano.
    • La vida; por cuanto busca preservar la existencia del ser humano.
    • La igualdad; ya que todos los sujetos deben de recibir un mismo trato por parte del médico independientemente de la raza, condición social, religión o ideología que profesen.

    Principios de Beauchamp
    Respeto de los principios de Beauchamp tenemos:
    • Principio de autonomía: por medio de este principio se señala que la persona tiene la capacidad de formar sus propias convicciones y tomar decisiones sin intervención de terceros.
    • Principio de beneficencia: este principio señala que se debe de realizar todas las conductas necesarias que estén dirigidas procurar el bien del enfermo.
    • Principio de no maleficencia: este principio exige el deber de no dañar a los demás.
    • Principio de justicia: indica que se debe de dar a cada sujeto lo que le corresponde, según sus necesidades, brindándoles el mismo trato a aquellas personas que se encuentren en situaciones similares.

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  10. Juan Carmelo PRUDENCIO CARDENAS23 de junio de 2011, 9:50

    El JURAMENTO HIPOCRÁTICO constituye, según parece, uno de los solemnes rituales académicos que llevan a cabo aún los estudiantes en las escuelas de medicina, como un acto final de su formación profesional; corresponde pues al momento de su graduación como MÉDICOS, mediante el cual, según reza en cada palabra del juramento, hacen un acto de compromiso ético de ejercer la ciencia y el arte de la medicina exclusivamente a beneficio del paciente. En mi opinión, el juramento hipocrático, impregnada de una profunda filosofía moral, representa una genial contribución de los griegos- los griegos que están en todo-a la cultura moral médica; el griego pues ve en cada médico a un moralista, y en cada filósofo a un médico, quizá por eso en el escrito hipocrático SOBRE LA DECENCIA se escribe: "El médico que a la vez es filósofo es igual a los dioses".
    Ahora bien, cuando se escucha: "juro solemnemente que en cualquier casa que éntre no llevaré otro objeto que el bien de los enfermos, librándome de cometer voluntariamente faltas injuriosas o acciones corruptoras...", podemos reconocer en estas palabras el principio de la beneficencia o de la no maleficencia de BEAUCHAMP.
    Y en cuanto expresan: "ejerceré mi profesión con inocencia y pureza...", quizá pueda interpretarse la presencia del principio de autonomía o de respeto al paciente.
    Y finalmente cuando en otra parte del juramento dicen:"...estableceré el régimen de los enfermos de la manera que les sea más provechosa...no accederé a pretensiones que se dirijan a la administración de venenos, ni efectuaré operación alguna con propósitos delictivos...", se puede reconocer una vez más el principio de la beneficencia, y una abierta declaración contra la eutanasia.
    En suma: sólo puedo distinguir en el Juramento Hipocrático el principio de la beneficencia y vagamente el principio de la autonomía.
    Juan C. PRUDENCIO CARDENAS.

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  11. Marilyn Samaniego Jimenez23 de junio de 2011, 11:40

    En el JURAMENTO HIPOCRÁTICO, apreciamos un contenido de carácter ético, con la finalidad de orientar de manera correcta el ejercicio de la medicina. Podemos determinar que en su contenido hay indicios de los principios que Beauchamp nos propone.

    Iniciaremos con el RESPETO POR LAS PERSONAS, si bien este principio no está claramente determinado podemos notar un indicio en “Jamás daré a nadie medicamento mortal, por mucho que me soliciten, ni tomaré iniciativa alguna de este tipo; tampoco administraré abortivo a mujer alguna.” De la sección subrayada se puede deducir que el médico no ejercerá presión alguna sobre el paciente para que tome una decisión.

    El segundo principio referido a la BENEFICIENCIA lo encontramos en “… en provecho de los enfermos y apartaré de ellos todo daño e injusticia.” Donde apreciamos el respeto a las normas morales de manera general; y en “… lo haré para bien de los enfermos, apartándome de toda injusticia voluntaria…” Al asegurar que no causara injusticia voluntaria, podemos notar un indicio de la acción de efecto doble, ya que el médico no desea causarle un mal al paciente, pero lo tiene que hacer para producirle un bien mayor. También es importante señalar que en “No tallaré cálculos, sino que dejaré esto a los cirujanos especialistas.” Nos hace referencia a la NO MALEFICIENCIA, ya que el médico no realizara actos fuera de su capacidad para evitar causar daño al paciente.

    Por último, es de precisar que el principio de JUSTICIA no está de manera explícita en el juramento, pero si podemos creer que este implícito en él; ya que en todo el contenido del juramento no realiza ninguna discriminación ni hace mención de tratos diferentes debido a la condición de las personas.

    Lo que sí está plasmado claramente en el juramento es el SECRETO MÉDICO “Todo lo que vea y oiga en el ejercicio de mi profesión, y todo lo que supiere acerca de la vida de alguien, si es cosa que no debe ser divulgada, lo callaré y lo guardaré con secreto inviolable.” Que si bien no es uno de los principios que Beauchamp propone, es importante señalar el respeto a la intimidad del paciente que ya se venía dando desde aquellas épocas.

    En conclusión, podemos señalar que el Juramento Hipocrático fue el inicio de una recopilación de principios que regulen la adecuada práctica médica y el respeto del paciente, por lo que este juramento es un importante suceso en la medicina. En la actualidad no es empleada en su redacción original, sin embargo se utiliza una adaptación del juramento que fue realizada por la Asociación Médica Mundial para crear el Juramento de Fidelidad Profesional.

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  12. Lesly Leyla Caceres Farfan23 de junio de 2011, 15:17

    Los griegos como cultura primigenia de la medicina parte de un conocimiento humano basada en la filosofía y la religión, bases que constituyen una fuente de establecer la moral y la ética en la majestuosa ciencia médica.
    Cada año miles de estudiantes de medicina de todas las universidades del mundo cumplen con el más solemne e importante acto que da por concluida su vida universitaria, cimentando asi su conocimiento en aspectos ético, técnico y social, consagrando desde ese punto a la medicina como la ciencia al servicio de la humanidad.
    Los principios estipulados en el Juramento Hipocrático evidencian indudablemente la responsabilidad que tiene el medico hacia su paciente y hacia la comunidad, considera el secreto profesional (tan vulnerado), desarrollar a cabalidad su profesión apelando al principio de beneficencia y no maleficencia, a cumplir con su deber de justicia (atendiendo aun si no se cuenta con recursos) como se encuentra descrito en Principios de Beauchamp reconocido en los códigos de ética a nivel mundial.
    Sin embargo es necesario precisar que la medicina si bien tiene preceptos a los cuales debe de respetar como el JURAMENTO HIPOCRATICO y otros códigos de ética, no garantiza su entero cumplimiento ya que es innegable aseverar que actualmente la interpretación que le pueda dar a éstos muchas veces se ve irrumpido en obstáculos como los sistemas de salud, economía, tecnología, idiosincrasia y hasta la religión. Convirtiendo a la medicina en una ciencia que precisamente no se acondiciona a ciertos parámetros establecidos en el Juramento porque simplemente se desarrolla en un ámbito real muy diferente, que permite hacer objeciones y excepciones.
    Es imperante precisar que la medicina debe preservar su dignidad, honor, solidaridad con el paciente, fidelidad a su profesión y lo más importante es apelar a que los médicos no deben trabajar con el desapego de quien ha visto tanto sufrimiento que nada puede ya sorprenderle.

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  13. Jonathan Juhel Correa Arias23 de junio de 2011, 15:53

    Este trabajo es muy puntual y en relación a eso esquematizare este comentario en base a los principios y en cada uno los relacionare con los preceptos del juramento hipocrático que considere pertinentes.
    Los principios de la bioetica son tres: respeto a las personas, beneficencia y justicia.
    Respeto a las personas, entendido como el respeto a la calidad de sujeto de derecho y por tal digno, igual, libre y en tal libertad respetar su autonomía en cuanto a su consentimiento.
    Dignidad entendida como la base de los derechos fundamentales inherentes e irrenunciables, es en este punto que concuerda con el precepto hipocrático: “Aún bajo amenazas, no admitiré utilizar mis conocimientos médicos contra las leyes de la humanidad”, leyes de la humanidad constitucionalizados en los derechos fundamentales.
    También calza en este principio el precepto: “Tendré absoluto respeto por la vida humana, desde su concepción”, vida enmarcada dentro de la dignidad y condiciones adecuadas de salud física y mental.
    Beneficencia, entendida como procurar la mejora del paciente y la no configuración de daños hacia el. Tenemos aquí el primer precepto: “En el momento de ser admitido entre los miembros de la profesión médica, me comprometo solemnemente a consagrar mi vida al servicio de la humanidad”, Servicio encaminada a la salud de la persona. También se puede enmarca aquí: “Desempeñaré mi arte con conciencia y dignidad. La salud y la vida del enfermo serán las primeras de mis preocupaciones”, entendiendo que generar la condición salud en el paciente es le meta por excelencia, es así que se habla en el juramento de beneficencia respecto del paciente.
    Justicia, todo servicio, apoyo debe ser distribuido de manera equitativa a los pacientes, es decir, se trata de un principio que enfoca el derecho de igualdad que tienen los pacientes, ante supuestos iguales, tratos iguales, este principio regula la manera de distribución del segundo principio mencionado anteriormente. Aquí el precepto “No permitiré que entre mi deber y mi enfermo vengan a interponerse consideraciones de religión, de nacionalidad, de raza, partido o clase” nos da los supuestos que el doctor no debe utilizar para discriminar a algún paciente.
    Si bien el juramento y los principios son los rectores morales del medico y aunque estos sean regulados jurídicamente, tal como están, son insuficientes.
    Como decidir en el caso de que un medico se encuentre con dos pacientes con alto riesgo (solo puede salvar a uno), tengan la misma religión, nacionalidad, raza, partido, clase y demás calificativos iguales (existe imposibilidad de alegar discriminación); pero uno se un sujeto de 20 y otro de 60 años, como decidir a quien salvar. La vida es de igual valor que la de otro, quedaría a discrecionalidad del medico decidir a quien salvar, si el medico tiene una preponderancia al proyecto de vida, salvara al joven, pero si tiene una inclinación por el “mas vulnerable” salvara al adulto mayor, ¿como imputar discriminación? si ambos tienen el mismo grado de riesgo. Más complicado aun si ambos poseen edades parecidas; o en caso de una gestante con peligro de muerte por el embarazo, acaso en esta se puede pedir arriesgarse a morir o dañar al concebido alegado que ella puede tener mas hijos (teniendo en cuenta el precepto hipocrático que dice “Tendré absoluto respeto por la vida humana, desde su concepción”). Son problemas de carácter bioetico que a mi entender no se podría resolver con la autonomía de la madre, la justicia o beneficencia.

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  14. correa arias, jonathan juhel23 de junio de 2011, 16:01

    Este trabajo es muy puntual y en relación a eso esquematizare este comentario en base a los principios y en cada uno los relacionare con los preceptos del juramento hipocrático que considere pertinentes.
    Los principios de la bioetica son tres: respeto a las personas, beneficencia y justicia.
    Respeto a las personas, entendido como el respeto a la calidad de sujeto de derecho y por tal digno, igual, libre y en tal libertad respetar su autonomía en cuanto a su consentimiento.
    Dignidad entendida como la base de los derechos fundamentales inherentes e irrenunciables, es en este punto que concuerda con el precepto hipocrático: “Aún bajo amenazas, no admitiré utilizar mis conocimientos médicos contra las leyes de la humanidad”, leyes de la humanidad constitucionalizados en los derechos fundamentales.
    También calza en este principio el precepto: “Tendré absoluto respeto por la vida humana, desde su concepción”, vida enmarcada dentro de la dignidad y condiciones adecuadas de salud física y mental.
    Beneficencia, entendida como procurar la mejora del paciente y la no configuración de daños hacia el. Tenemos aquí el primer precepto: “En el momento de ser admitido entre los miembros de la profesión médica, me comprometo solemnemente a consagrar mi vida al servicio de la humanidad”, Servicio encaminada a la salud de la persona. También se puede enmarca aquí: “Desempeñaré mi arte con conciencia y dignidad. La salud y la vida del enfermo serán las primeras de mis preocupaciones”, entendiendo que generar la condición salud en el paciente es le meta por excelencia, es así que se habla en el juramento de beneficencia respecto del paciente.
    Justicia, todo servicio, apoyo debe ser distribuido de manera equitativa a los pacientes, es decir, se trata de un principio que enfoca el derecho de igualdad que tienen los pacientes, ante supuestos iguales, tratos iguales, este principio regula la manera de distribución del segundo principio mencionado anteriormente. Aquí el precepto “No permitiré que entre mi deber y mi enfermo vengan a interponerse consideraciones de religión, de nacionalidad, de raza, partido o clase” nos da los supuestos que el doctor no debe utilizar para discriminar a algún paciente.
    Si bien el juramento y los principios son los rectores morales del medico y aunque estos sean regulados jurídicamente, tal como están, son insuficientes.
    Como decidir en el caso de que un medico se encuentre con dos pacientes con alto riesgo (solo puede salvar a uno), tengan la misma religión, nacionalidad, raza, partido, clase y demás calificativos iguales (existe imposibilidad de alegar discriminación); pero uno se un sujeto de 20 y otro de 60 años, como decidir a quien salvar. La vida es de igual valor que la de otro, quedaría a discrecionalidad del medico decidir a quien salvar, si el medico tiene una preponderancia al proyecto de vida, salvara al joven, pero si tiene una inclinación por el “mas vulnerable” salvara al adulto mayor, ¿como imputar discriminación? si ambos tienen el mismo grado de riesgo. Más complicado aun si ambos poseen edades parecidas; o en caso de una gestante con peligro de muerte por el embarazo, acaso en esta se puede pedir arriesgarse a morir o dañar al concebido alegado que ella puede tener mas hijos (teniendo en cuenta el precepto hipocrático que dice “Tendré absoluto respeto por la vida humana, desde su concepción”). Son problemas de carácter bioetico que a mi entender no se podría resolver con la autonomía de la madre, la justicia o beneficencia.

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  15. Este trabajo es muy puntual y en relación a eso esquematizare este comentario en base a los principios y en cada uno los relacionare con los preceptos del juramento hipocrático que considere pertinentes.
    Los principios de la bioetica son tres: respeto a las personas, beneficencia y justicia.
    Respeto a las personas, entendido como el respeto a la calidad de sujeto de derecho y por tal digno, igual, libre y en tal libertad respetar su autonomía en cuanto a su consentimiento.
    Dignidad entendida como la base de los derechos fundamentales inherentes e irrenunciables, es en este punto que concuerda con el precepto hipocrático: “Aún bajo amenazas, no admitiré utilizar mis conocimientos médicos contra las leyes de la humanidad”, leyes de la humanidad constitucionalizados en los derechos fundamentales.
    También calza en este principio el precepto: “Tendré absoluto respeto por la vida humana, desde su concepción”, vida enmarcada dentro de la dignidad y condiciones adecuadas de salud física y mental.
    Beneficencia, entendida como procurar la mejora del paciente y la no configuración de daños hacia el. Tenemos aquí el primer precepto: “En el momento de ser admitido entre los miembros de la profesión médica, me comprometo solemnemente a consagrar mi vida al servicio de la humanidad”, Servicio encaminada a la salud de la persona. También se puede enmarca aquí: “Desempeñaré mi arte con conciencia y dignidad. La salud y la vida del enfermo serán las primeras de mis preocupaciones”, entendiendo que generar la condición salud en el paciente es le meta por excelencia, es así que se habla en el juramento de beneficencia respecto del paciente.
    Justicia, todo servicio, apoyo debe ser distribuido de manera equitativa a los pacientes, es decir, se trata de un principio que enfoca el derecho de igualdad que tienen los pacientes, ante supuestos iguales, tratos iguales, este principio regula la manera de distribución del segundo principio mencionado anteriormente. Aquí el precepto “No permitiré que entre mi deber y mi enfermo vengan a interponerse consideraciones de religión, de nacionalidad, de raza, partido o clase” nos da los supuestos que el doctor no debe utilizar para discriminar a algún paciente.
    Si bien el juramento y los principios son los rectores morales del medico y aunque estos sean regulados jurídicamente, tal como están, son insuficientes.
    Como decidir en el caso de que un medico se encuentre con dos pacientes con alto riesgo (solo puede salvar a uno), tengan la misma religión, nacionalidad, raza, partido, clase y demás calificativos iguales (existe imposibilidad de alegar discriminación); pero uno se un sujeto de 20 y otro de 60 años, como decidir a quien salvar. La vida es de igual valor que la de otro, quedaría a discrecionalidad del medico decidir a quien salvar, si el medico tiene una preponderancia al proyecto de vida, salvara al joven, pero si tiene una inclinación por el “mas vulnerable” salvara al adulto mayor, ¿como imputar discriminación? si ambos tienen el mismo grado de riesgo. Más complicado aun si ambos poseen edades parecidas; o en caso de una gestante con peligro de muerte por el embarazo, acaso en esta se puede pedir arriesgarse a morir o dañar al concebido alegado que ella puede tener mas hijos (teniendo en cuenta el precepto hipocrático que dice “Tendré absoluto respeto por la vida humana, desde su concepción”). Son problemas de carácter bioetico que a mi entender no se podría resolver con la autonomía de la madre, la justicia o beneficencia.
    alumno:Jonathan Juhel Correa Arias

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  16. Luis Fernando Hinostroza Chuman23 de junio de 2011, 18:31

    ElJuramento Hipocrático es un mensaje y pensamiento dirigido a los profesionales de la medicina humana, den donde se le somete a un compromiso ético y de buenas costumbres, así como de una intachable conducta en el ejercicio de sus funciones encaminadas a sanar pacientes, sin considerar distinción alguna ni marginación de ninguna índole.
    Asismismo, exhortando, aunque en primera persona, a no realizar actos que vayan contra lo legal y moral; haciendo énfasis en las prácticas abortiva, así como en el respeto, la reserva y confindencialidad que debe asumir respecto a la no divulgación de lo que sea dominio de su profesión; y que hoy por hoy lamentablemente se vienen realizando en un sólo afán de lucro y tirando a la borda tanto el juramento así como todo principio moral. Faltando admás a su vocación social-humana,que son los primeros principios que deben imperar en su diaria labor.
    Podemos agregar también que en laactualidad se ha venido a menos la observancia de estos principios-compromisos, por cuanto además podemos aapreciar a muchos médicos mostrando un comportamiento negativo e impaciente,frente a sus propios pacientes; y como ejemplo basta mencionar toda la problemática en cuanto a la atención de los galenos que operan en ESSALUD o para el Ministerio de Salud,ocasionando con estas conductas tremendas situaciones de deficiencia, daño y malestar en la sociedad.
    En cuanto al principialismo sostenida por Beauchamp y Childres tratados "Principios de Ética Biomédica" en la que sostiene esta corriente se basa en otros principios que son las normas de la no maleficencia y la beneficensa, autonomia y justicia.
    En conclusion a los dos temas tratados sostengo a mi parecer que estas dos convergen a un mismo fin que son los valorres éticos puestos en manifiesto en ejercicio de la medicina humana y en cuanto al derecho le cabe la necesidad de la aplicacion de nuevas normas que regulen el ejercicio de esta profesion en beneficio de la salud en nuestra sociedad.

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  17. Diana E. Pérez Ruiz23 de junio de 2011, 19:46

    Análisis Juramento Hipocrático

    Todo profesional, para desenvolverse en su campo laboral tiene que ceñirse a un código de ética. En el caso de la medicina, específicamente , el médico debe respetar y aplicar lo que le dice su Juramento Hipocrático, que es el fundamento por el cual el galeno debe orientar la práctica de su oficio, asimismo el juramento se basa a partir de la responsabilidad del ser humano y la conciencia de ella. Lo que quiere decir, que el ejercicio de esta profesión tiene que ser bajo la premisa del respeto a la vida y a la dignidad de la persona. Hoy en día con el avance tan vertiginoso de la tecnología, ha permitido encontrar los medios idóneos para poder realizar operaciones, transplantes e incluso clonaciones, todo ello se supone que es con el fin de salvar una vida, o por lo menos mejorar las condiciones de vida del paciente. Sin embargo, es muy triste tener que ver en los noticieros cada negligencia médica que cometen atentando contra la vida de las personas, negándole el libre desarrollo de éstas. ¿Dónde sucede esto? , generalmente en los hospitales, lo más patético es ver a estos personajes cometiendo este tipo de atentados en entidad del Estado y en una clínica son los hombres más responsables que puedan existir, me pregunto dónde quedó el juramento que hicieron en el que se comprometen solemnemente a consagrar su vida al servicio de la humanidad, al respeto absoluto por la vida humana, el trato igual, sin distinciones de credo, religión, raza, creo que eso simplemente quedó en el mero formalismo que tiene todo acto solemne. Es una vergüenza que nuestros médicos, siendo aquellas personas que tienen en su posibilidad de salvar vidas, este valor como tal se haya quedado en letra muerta. Es una pena que situaciones como estas, que son anormales, se hayan vuelto en una práctica frecuente, lo anormal se volvió normal.
    Por otro lado es importante mencionar que los preceptos del juramento Hipocrático han constituido el fundamento de toda ética médica a lo largo de los siglos. A partir de la década del 60 se buscó un consenso sobre normas éticas para aplicar a los nuevos problemas médicos. Así se estableció un acuerdo sobre principios básicos: beneficencia, no maleficencia, justicia y respeto por la autonomía del paciente con sus dos reglas de confidencialidad y de veracidad. Estos principios los encontramos presente por ejemplo en el consentimiento informado que es la máxima expresión de este principio de autonomía, constituyendo un derecho del paciente y un deber del médico, pues las preferencias y los valores del enfermo son primordiales desde el punto de vista ético y suponen que el objetivo del médico es respetar esta autonomía porque se trata de la salud del paciente. En cuanto al tema de no maleficencia está íntimamente ligado a ejercer la profesión dignamente y a conciencia; mantener incólumes por todos los conceptos y medios a mi alcance el honor y las nobles tradiciones de la profesión médica. Finalmente el principio de justicia está vinculado con no permitir que consideraciones de credo político o religioso, nacionalidad, raza, partido político o posición social se interpongan entre mis deberes profesionales y mi paciente.
    Para concluir, los señores que ejercen este tipo de profesión deberían volver a leer su juramento hipocrático, entender y comprenderlo que es lo más importante, para que no protagonicen las escenas tan vergonzosas que hacen en televisión, y que dejan mucho que desear con su proceder. Por último si aún así no entendieran la responsabilidad que tienen, pues se les debería dejar inhabilitados, por una mala praxis.

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  18. Yupanqui Chamorro, D. Sergio23 de junio de 2011, 21:18

    El juramento hipocrático se muestra prima facie como un verdadero código ético, el cual contiene principios que han servido no solo para normar la conducta del médico respecto al paciente, sino que además han inspirado la creación de nuevos documentos éticos los cuales tienen por objeto proporcionar un marco analítico que dirija la resolución de problemas originados por investigaciones que incluyan seres humanos; así por ejemplo en el informe de Belmont se erigen tres principios:
    Respeto a las Personas.- el cual hace referencia al respeto de la autonomía del ser humano así como la protección de las personas quienes tienen la autonomía disminuida.
    Beneficencia.- el cual se desdobla en beneficencia strictu sensu que procura el bienestar del paciente y el de no maleficencia que procura no causar daño en la salud del paciente.
    Justicia.-los beneficios obtenidos a través de la investigación médica deben ser distribuidos hacia todos sin ningún tipo de discriminación por motivo de sexo religión o condición social.
    Al margen de los cuestionamientos y críticas que reciban estos principios no se puede negar que han contribuido a tomar conciencia del valor del ser humano el cual nunca deberá ser instrumentalizado por los avances de la ciencia y la investigación médica.

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  19. KARLA FIGUEROA CALDAS23 de junio de 2011, 21:22

    Incluso, hasta en la Antigua Grecia parece que existieron lo que actual y coloquialmente llamamos los “malos médicos” , profesionales que sobreponen el interés propio y egoísta sobre el interés del paciente y el bien común. Hipócrates, no solo fue un erudito de la medicina, sino que también fue sabio al haber dado el primer paso en la elaboración de un catálogo de principios éticos que deberían guiar a todo médico en el ejercicio de su profesión. Lo más probable es que Hipócrates sabia que médicos inescrupulosos habría antes y después de Cristo.
    Aunque la versión original es considerada como una “reliquia” debido a que en 1948 fue adaptada a nuestro contexto, el Juramento Hipocrático es pronunciado por todo estudiante de medicina al concluir sus estudios. Y ahí se presenta el primer problema, pues para ser sinceros el que una persona diga de memoria todo el juramento no es indicador que lo tenga grabado en el corazón, por decirlo así.
    El Juramento Hipocrático, básicamente gira alrededor de dos pilares que al final forman parte de una solo: El respeto a la vida, la salud y finalmente, la dignidad del paciente. En cuanto al derecho a la vida, me pareció muy interesante leer lo siguiente en el párrafo 4: “No accederé a pretensiones que busquen la administración de venenos, ni sugeriré a nadie cosa semejante; me abstendré de aplicar a las mujeres pesarios abortivos”; lo cual evidencia que desde tiempos remotos, la vida era protegida sobre todas las cosas, ya se trate de una persona o de un no nacido, siendo éste una de las primeras manifestaciones del rechazo al aborto. Sin embargo, también podemos notar que el tema de la eutanasia asistida por un médico ya formaba parte de los tantos dilemas de la humanidad. El tema de la protección de la salud del paciente es claro al prescribirse que el médico debe adoptar las medidas más adecuadas para el bienestar y restablecimiento del enfermo. Todo lo expuesto, se unifica en la dignidad del paciente.
    Sin embargo, hay que ser realistas. Un médico, en cuya formación académica no ha presentado esa sensibilidad propia de quien esta a merced de curar y tratar a los demás desinteresadamente -y por lo contrario- su razón de ser es el ánimo de lucrar, no podrá internalizar el real mensaje de este juramento. Por tal razón, es tan común ver o escuchar en las noticias que un médico X cobró a un paciente por una medicina cuya distribución era gratuita o los tan conocidos “médicos aborteros” que suministran a jovencitas irresponsables una serie de pastillas para abortar.
    Si bien es cierto que en nuestro ordenamiento jurídico castiga a todo médico que contravenga con los fines de esta carrera tan noble, ya sea dolosa o negligentemente, la solución no se encuentra ahí. Es menester de las facultades de medicina inculcar a todos los alumnos desde que llevan por primera vez el curso de anatomía, el amor por la medicina, el velar por los enfermos no solo curándolos sino también tratándolos con el respeto que como seres humanos todos merecemos.
    Finalmente, respecto a los PRINCIPIOS DE BEAUCHAMP estos son el Principio de Autonomía, de Justicia, de Beneficencia y de no Maleficencia. Encontramos plasmados en el Juramento Hipocrático los dos últimos, en el sentido que el médico debe procurar tomar las decisiones más certeras, y en todo caso, se debe tratar de dañar lo menos posible con el afán de obtener mayor beneficio.

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  20. Nina Cuentas, Victor Alberto 0802007123 de junio de 2011, 22:06

    Luego de haberle dado lectura al juramento hipocrático, constato que, efectivamente, están presentes ciertos principios formulados por Beduchamp, como el principio de no maleficencia, al establecerse en el juramento que se establecerá el régimen de tratamiento de los enfermos de manera que les sea más provechosa, con lo cual se evita que el médico que trate a algún enfermo le haga daño con sus actuaciones, y por consiguiente, solo debe procurarle el bien en su estado de salud; sin embargo, en la misma línea se establece que el médico le dará el tratamiento que él mismo considere más provechoso según sus facultades y su propio entender, este criterio desconoce el principio de autonomía o de respeto por las personas, en cuanto a las decisiones que estas pueden tomar respecto a lo que ellas consideren más beneficioso para su estado de salud, ya que no se le consultaría al enfermo por el tratamiento del cual va a ser sujeto, sino que ello será decidido por el médico, prescindiendo de todo consentimiento del paciente, negando con ello su capacidad de tomar decisiones que tienen que ver son su estado de salud, con lo que se puede observar la marcada acentuación del carácter paternalista del médico para con su paciente.

    El principio de justicia, de cierta manera también se puede observar en lo que se refiere la parte de “instrucción con preceptos, lecciones orales y demás modos de enseñanza”, debido a que con ello se puede viabilizar los conocimientos de nuevos tratamientos médicos puedan ser transmitidos y puestos en práctica para que con ello se pueda distribuir los beneficios de dichos tratamientos.

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  21. Jossye T. Manhualaya Téllez23 de junio de 2011, 23:17

    Realizaremos el análisis principio por principio:
    1.- El principio de respeto por la persona o autonomía no lo puedo ubicar aquí dado que este principio consiste en el respeto del médico por la elección del paciente de decidir si toma un tratamiento o no con los riesgos y beneficios que implica. Esto no se ve reflejado ni en el juramento hipocrático griego (de carácter paternalista), ni en su adaptación actual. Esta ausencia de dicho principio la corroboramos también con la realidad donde la mayoría de médicos no brinda toda la información necesaria de los tratamientos que recomiendan.
    El principio de beneficencia lo hallamos en la siguiente frase: VELAR ante todo por la salud de mi paciente, con lo que nos confirma que el médico buscará el mayor beneficio del paciente con los tratamientos que aplicará.
    Y por último el principio de justicia es encontrado explícitamente en estas líneas: NO PERMITIRÉ que consideraciones de edad, enfermedad o incapacidad, credo, origen étnico, sexo, nacionalidad, afiliación política, raza, orientación sexual, clase social o cualquier otro factor se interpongan entre mis deberes y mi paciente; así manifiesta el juramento que todos tendrán acceso a los mismos tratamientos por su sola condición de seres humanos sin hacer distinciones de ninguna clase.

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  22. Julio Danetri Toledo dice:
    Leído el Juramento Hipocrático, se puede observar que este es más un compromiso de lealtad con la profesión. Como se sabe, durante la antigua Grecia eran 3 los oficios más reconocidos: Médico, Procurador (hoy abogado) y Político. Como señalé, el Juramento si bien como mi compañera señaló, se dejan ver los principios de Beauchamp, creo que el juramento no fue inicialmente creado como un compromiso con la com,unidad, sino más bien con un compromiso con el propio oficio y los colegas. Eso produce que en el propio juramento los médicos se nieguen a administrar procedimientos que puedan afectar a sus pacientes, aún cuando ellos mismos lo soliciten. En la actualidad sin embargo este juramento a pasado muchas veces al olvido, beneficiándose el clientelismo y la publicidad. Así, hace poco podemos observar por televisión como un médico le aplicó el procedimiento de la eutanasia a un anciano. Esto a su vez ha producido que la pofesión médica se deteriore ante la vista de la sociedad y dentro incluso de los mismos colegas de profesión. El respeto al oficio se ha perdid y esto produce que muchos doctores utilizen sus artes solo para ganar dinero y para ser un poco más conocidos.

    Sobre los principios de Beauchamp estos son:
    “No maleficencia”
    Beneficencia
    Autonomía
    Justicia

    ¿La diferencia entre los dos? Creo que los principios de Beauchamp están dirigidos al actuar del médico frente a los pacientes y a un comportamiento ético--moral, mientras que el juramento está dirigido a los colegas de profesión y por lo tanto a un comportamiento ético-profesional.

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  23. Este trabajo es muy puntual y en relación a eso esquematizare este comentario en base a los principios y en cada uno los relacionare con los preceptos del juramento hipocrático que considere pertinentes.
    Los principios de la bioetica son tres: respeto a las personas, beneficencia y justicia.
    Respeto a las personas, entendido como el respeto a la calidad de sujeto de derecho y por tal digno, igual, libre y en tal libertad respetar su autonomía en cuanto a su consentimiento.
    Dignidad entendida como la base de los derechos fundamentales inherentes e irrenunciables, es en este punto que concuerda con el precepto hipocrático: “Aún bajo amenazas, no admitiré utilizar mis conocimientos médicos contra las leyes de la humanidad”, leyes de la humanidad constitucionalizados en los derechos fundamentales.
    También calza en este principio el precepto: “Tendré absoluto respeto por la vida humana, desde su concepción”, vida enmarcada dentro de la dignidad y condiciones adecuadas de salud física y mental.
    Beneficencia, entendida como procurar la mejora del paciente y la no configuración de daños hacia el. Tenemos aquí el primer precepto: “En el momento de ser admitido entre los miembros de la profesión médica, me comprometo solemnemente a consagrar mi vida al servicio de la humanidad”, Servicio encaminada a la salud de la persona. También se puede enmarca aquí: “Desempeñaré mi arte con conciencia y dignidad. La salud y la vida del enfermo serán las primeras de mis preocupaciones”, entendiendo que generar la condición salud en el paciente es le meta por excelencia, es así que se habla en el juramento de beneficencia respecto del paciente.
    Justicia, todo servicio, apoyo debe ser distribuido de manera equitativa a los pacientes, es decir, se trata de un principio que enfoca el derecho de igualdad que tienen los pacientes, ante supuestos iguales, tratos iguales, este principio regula la manera de distribución del segundo principio mencionado anteriormente. Aquí el precepto “No permitiré que entre mi deber y mi enfermo vengan a interponerse consideraciones de religión, de nacionalidad, de raza, partido o clase” nos da los supuestos que el doctor no debe utilizar para discriminar a algún paciente.
    Si bien el juramento y los principios son los rectores morales del medico y aunque estos sean regulados jurídicamente, tal como están, son insuficientes.
    Como decidir en el caso de que un medico se encuentre con dos pacientes con alto riesgo (solo puede salvar a uno), tengan la misma religión, nacionalidad, raza, partido, clase y demás calificativos iguales (existe imposibilidad de alegar discriminación); pero uno se un sujeto de 20 y otro de 60 años, como decidir a quien salvar. La vida es de igual valor que la de otro, quedaría a discrecionalidad del medico decidir a quien salvar, si el medico tiene una preponderancia al proyecto de vida, salvara al joven, pero si tiene una inclinación por el “mas vulnerable” salvara al adulto mayor, ¿como imputar discriminación? si ambos tienen el mismo grado de riesgo. Más complicado aun si ambos poseen edades parecidas; o en caso de una gestante con peligro de muerte por el embarazo, acaso en esta se puede pedir arriesgarse a morir o dañar al concebido alegado que ella puede tener mas hijos (teniendo en cuenta el precepto hipocrático que dice “Tendré absoluto respeto por la vida humana, desde su concepción”). Son problemas de carácter bioetico que a mi entender no se podría resolver con la autonomía de la madre, la justicia o beneficencia.
    alumno:correa areias jonathan juhel

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  24. Patricia Susana Chávez Cabello24 de junio de 2011, 12:25

    El Juramento Hipocrático es un juramento público que proviene de de la tradición de la medicina occidental. Su contenido es de carater ético y ha servido de guía a los médicos desde la antigua Grecia. Es un juramento que tiene como base la responsabilidad del ser humano y busca el beneficio y el bien del enfermo. Actualmente, son cada vez menos los médicos que realizan el tradicional Juramento Hipocrático y , en su lugar, realizan la Declaración de Ginebra.
    Los principios de Beauchamp son: Principio de autonomía que tiene como máxima expresión el consentimiento informado; Principio de beneficiencia que es la obligación de actuar en beneficio de otros; Principio de no maleficiencia que es el abstenerse de realizar acciones que puedan causar daño; Principio de justicia que indica que se debe tratar a uno como corresponda.

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  25. Giancarlo Valladolid Ferrer24 de junio de 2011, 13:10

    El contenido filosófico del Juramento Hipocrático, estuvo en la moral, la vida y costumbres de Grecia, además contiene las enseñanzas éticas que tienen vigencia aún hoy en día en la conducta y quehacer del médico. Su creador fue el filósofo Hipócrates. El Juramento Hipocrático se mantiene en la historia de la medicina como una de las principales fuentes de la ética médica aunque su contenido ha variado a través del tiempo, adapatándose a las circunstancias y conceptos éticos dominantes de cada sociedad. La última actualización fue hecha por la Declaración de Ginebra.
    Los principios de Beauchamp contienen el esquema moral que supone la declaración del valor y dignidad de la persona. Son 4 los principios:Principio de autonomía,Pricipio de beneficencia,Principio no maleficencia y Principio de justicia.

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